Braille Literario

Alfabeto Braille

En 1825 Luis Braille ideó un sistema de puntos en relieve que aporta a las personas ciegas una herramienta válida y eficaz para leer y escribir. Este sistema mejoró significativamente el acceso a la educación, la cultura y la información.

El sistema parte de seis puntos que se ubican en una matriz de 2 columnas y 3 filas que se enumeran como punto 1, situado en la parte superior izquierda de la matriz, el punto 2 debajo del punto 1 y el punto 3 debajo del punto 2; el punto 4 se ubica en la parte superior derecha de la matriz. el punto 5 debajo del punto 4 y el punto 6 debajo del punto 5.

Ejemplo de letras mayúsculas en las que se aprecia el uso de dos cajetines.

La combinación de los seis puntos permite obtener 64 combinaciones diferentes, incluyendo la que no tiene ningún punto, que se utiliza como espacio en blanco para separar palabras, números, etc. La presencia o ausencia de puntos determina de qué letra se trata.

Ejemplo de número de una cifra, concretamente el número 2.

Para representar algunos signos es preciso utilizar más de un carácter braille, pues las 64 combinaciones resultan insuficientes. Por ejemplo, para representar las letras mayúsculas se antepone el carácter braille formado por los puntos 4 y 6, y para los números se antepone el carácter Braille formado por los puntos 3, 4, 5 y 6..

Vocales acentuadas.

El «Documento técnico B 2: Signografía básica de las lenguas cooficiales españolas» contiene los signos básicos para la escritura del español, aprobados en junio de 1987 en Montevideo, Uruguay, por la Reunión de Imprentas Braille de Habla Hispana. En ella se recogen algunos signos braille específicos del idioma como son las letras acentuadas. Cada idioma tiene sus signografía braille. El Braille Literario también se denomina Braille Integral o Braille de Grado 1.

Autores:  La Comisión Braille Española (CBE), órgano de la ONCE que ostenta la máxima autoridad en España para la fijación de normas de uso y desarrollo del sistema braille de lecto-escritura, así como la simbología en relieve y color aplicable a láminas o cualquier otro producto utilizable por las personas ciegas y deficientes visuales. En tal sentido, a través de su Pleno, se aprueban las signografías oficiales de distintas materias que se utilizan en España. Muchas de estas signografías, así como otros proyectos relacionados con el braille y los materiales en relieve accesibles, son fruto de la labor de distintos Grupos de Trabajo que el Pleno de la CBE considera oportuno crear.

Idiomas:  El sistema braille se encuentra en múltiples idiomas y también se adapta a diferentes materias (literatura, matemáticas, química, música, etcétera).

Licencia:  Es de uso libre y dominio público.

Requisitos:

  • Para producir documentos impresos en Braille se precisan impresoras que son capaces de recibir matrices de puntos en lugar de símbolos y caracteres gráficos.  Además es preciso contar en el ordenador con software de transcripción de textos tinta a Braille.
  • Para leer la información de las pantallas de equipos informáticos o de acceso a la información se utilizan líneas Braille conectadas al equipo, bien por cable o de forma inalámbrica.

Accesibilidad:

  • Se puede usar siendo ciego o teniendo un resto visual poco funcional.
  • Se puede usar con resto visual funcional.
  • Dispone de un relieve suficiente que permite, con entrenamiento, discriminar los signos a una velocidad de lectura normalizada.
  • Es posible convertir textos de Braille a otros formatos de manera que la información resulte integradora para los entornos educativos, laborales, culturales y de acceso a la información.
  • Se precisa lecto-escritura en Braille si no se dispone de resto visual funcional.
  • Visualmente también es posible leer Braille pero resulta cansado y muy fatigoso dependiendo del soporte con el que se esté trabajando.
  • Se precisa comprensión lectora.
  • Se precisa psicomotricidad fina.
  • Se puede usar siendo sordo o teniendo una deficiencia auditiva poco funcional.

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